domingo, 12 de abril de 2015

Eres la taza que dejaste medio llena en el velador
El libro que te recomendé y nunca terminaste
Por que no tenías tiempo
La carpeta en mi computador con tus fotos
Y tus archivos
Las llaves de tu casa


Y un puñado de papeles escritos
Me recuerdan que:

El café no lo terminarás
No sabrás el triste final de aquel libro
Tampoco volverás a ver esas antiguas fotos
Y sacarás una nueva copia de llaves
O en su defecto
Si estás paranoica ( como aveces lo eras)
Cambiarás la chapa

Y podré recuperarte escribiéndote.